El joven Rey Midas
El Jabonero Por Gerardo Becerra Chávez de Hita “Todo lo que toca lo convierte en oro”. Así reza la máxima […]
Artículos de Gerardo Becerra
Nacer muerto
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita La vorágine en que ha metido al país la elección del Estado de México […]
¿Messeguer gobernador?
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita No, no es un broma, tal vez el tabasqueño que todavía gobierna […]
La Plaza de los 106
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita Sexenio va y sexenio viene y no pasa inadvertido que casi todos […]
Nueva constitución para Morelos
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita Los días y los meses pasan y está LIII legislatura del Congreso de […]
Aprende del pasado o lo volverás a vivir
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez-Hita Corrían los últimos meses del año 1997 y el General Carrillo Olea no […]
¿Se va o se queda hasta el final?
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita Un título raro el de esta columna, sin embargo me refiero al (des) gobernador […]
El desconcierto con los conciertos
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita Todavía, en esta etapa del controvertido, por decir lo menos, gobierno de Graco […]
Los Juniors del Gobierno
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita El hijastro del gobernador, actual presidente de lo que queda del PRD en Morelos es […]
Tetelcingo, la ignominia
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita Grave, no, gravísimo lo que sucede con las fosas clandestinas que el gobierno […]
Gobierno, violencia, omisión y colusión
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita Dieciocho meses se auto impuso el mentiroso gobernante de Morelos para erradicar la […]
El acompañante incómodo
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita “Graco era un dolor de muelas. Cuando lo conocí andaba de perro faldero […]
Más y más deuda
El Jabonero Por: Gerardo Becerra Chávez de Hita Lo sucedido en el Congreso de Morelos el pasado martes 26 de abril no […]
De mal en peor
El Jabonero “No existe peor ciego que el que no quiere ver, ni peor sordo que el que no quiere oír” […]