Granito de Arenas
José Arenas Merino
31 I 16
El abogado Miguel Ángel Osorio Chong, egresado de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, llamó a los legisladores –diputados federales y senadores- de su partido político, el PRI, a acelerar la emisión de una ley que está en estudio para su dictamen hace ya más de cuatro años, la del llamado Mando Único.
Ese cuerpo policiaco opera y funciona, con diversas modalidades por la falta de un criterio que le dé uniformidad, en 26 estados de la república, no obstante la ley que le debería dar sustento no ha sido promulgada.
El exhorto del Secretario de Gobernación, responsable entre otras atribuciones de la seguridad pública en el país, es una tácita aceptación de que esos cuerpos policiacos que hoy están activos en casi todas las entidades federativas, lo hacen al margen de la ley, o dicho de otro modo: son ilegales.
El propio funcionario aclaró que actualmente, el Mando Único opera sostenido por convenios y acuerdos entre los gobiernos estatales y los municipales donde se ha establecido, no obstante que el artículo 115 de la Constitución General de la República vigente, establece la autonomía de los ayuntamientos. Y a pesar de que tal autonomía se refiere en su ley reglamentaria al uso y destino de los recursos federales que recibe para su administración y aprovechamiento –incluido desde luego el tema de la Seguridad Pública-, los gobernadores los retienen para sustentar el Mando Único, contraviniendo la ley, con el argumento de que de acuerdo al citado numeral, por razones de supuestas amenazas a la población, toman el control de la situación… y de los recursos.
Según el sistema político que diseñó el partido del abogado Osorio Chong y ha sido la norma no escrita que lo rige, una “petición” de su parte, en especial si la hace a nombre y con el respaldo del titular del Poder Ejecutivo, es una orden.
Y de acuerdo al mismo sistema, los partidos políticos satélites del PRI, habrán de atender a esa petición y sumarán sus votos entre todos para impulsar el proyecto de ley y darle la fuerza constitucional que podría darle vigencia plena, pero eso no ha ocurrido aún.
El Mando Único, o algo que se le parece, existe y funciona en otros países, y por su experiencia puede afirmarse que con excelentes resultados. Pero el que opera aquí, sin orden ni concierto en casi todos los estados de la república mexicana, no tiene un modelo único, sólo un mando: el del gobernador, mediante su Secretario de Seguridad Pública. No hemos sabido siquiera copiar a los exitosos, es la conclusión.
Y ahora el tema, de suyo escabroso y difícil, se partidizó con el exhorto del secretario Osorio, pues el Partido Acción Nacional, ya dijo que con el concurso de sus legisladores en ambas cámaras, habrá de presentar su propia iniciativa, diversa de la priísta. Eso va a significar más tiempo, pues ponerse de acuerdo implica más lobing, más negociación, más estira y afloja.
Y mientras tanto, la Suprema Corte de Justicia hace oídos sordos a los recursos legales que hasta su seno han llegado, firmados por ediles que se oponen al Mando Único, ante los magros resultados del uso de los recursos que, según la ley de la materia, les corresponde administrar para contar con policías municipales que, bien que mal, cuidan de la seguridad de sus habitantes.
48 años de ejercer el periodismo escrito, televisivo, radiofónico y digital. Primer corresponsal de El Universal y Radio UNAM en Europa y Notimex en Europa de Este. Director fundador del primer medio en Internet en Morelos. Abogado, escritor, locutor y textoservidor. Amigo de sus amigos. Libre pensador. Piscis.
Dejar una contestacion