De voz en voz
Por: Jorge Sánchez Bermúdez
Tal vez uno de los principales lastres de una sociedad tan compleja como es la nuestra, sea la muy llevada y traída corrupción, este terrible mal, ha sido de tal magnitud dañino para el país que es hoy el tema constante de un pueblo cansado de padecerla.
Soy de los que quiere creer que la corrupción no es como se ha dicho hasta el cansancio un tema cultural y hasta natural en los mexicanos, la mayoría de las personas que conozco no son corruptas ni pretenden serlo, es solo que lo peor de una sociedad lastimada se ha encumbrado en las altas esferas de poder y hoy la corrupción es absolutamente evidente.
Debemos reconocer que hoy vivimos un mundo aun mas perverso que el dominado solamente por la corrupción, es peor por que ahora ese tan abominable mal esta acompañado de un cinismo jamás antes visto, y de una impunidad absoluta.
Ejemplos sobran, ¿Cuántos políticos no hemos visto que en seis y hasta tres años pasan de pobres a millonarios con los excesos que esto conlleva? ¿Cuántas veces no hemos escuchado cosas como, el que no tranza no avanza, vivir fuera del presupuesto es vivir en error, o político pobre es un pobre político?, muchas, ya hasta nos parecen coloquiales.
Pero precisamente por eso debemos combatir ese flagelo de manera frontal, ya no podemos ni debemos permitir actos tan terribles de corrupción, la realidad nos golpeo en la cara y no la vimos venir, una día y por supuesto gracias a las redes sociales que no tienen piedad ni ideología, nos amanecimos con la certeza de que la corrupción había llegado a lo mas alto del escalafón, y nos enfermo, nos hizo caer en cuenta de la podredumbre en la que hemos estado viviendo y nos dimos asco, vergüenza, nos miramos en el espejo.
Como ciudadanos hemos perdido el respeto y la confianza en prácticamente todas las instituciones y formas de gobierno, a pesar que los políticos comienzan a hablar de la creación de órganos encargados de combatir la corrupción seguimos sin creer, nos suena lejano, por que son ellos mismos los que proponen y deciden que hacer al respecto, sabemos que son juez y parte y que jamás se darían un tiro en el pie.
¿Qué se necesita entonces para que estemos conformes? Se necesita de verdad ejemplos y un golpe de timón, el día que un gobernador corrupto sabido a todas luces como Graco Ramírez de Morelos termine en la cárcel, cuando un ex Presidente como Salinas pague por los actos de barbarie y corrupción, cuando los familiares de los políticos no sean vistos en autos de súper lujo, en yates, en viajes en aviones privados, cuando el país se iguale, tal vez comenzaremos a creer en las instituciones.
Ha llegado el momento de no permitir a la clase política que se siga alejando y enriqueciendo impunemente, es tiempo de poner un alto a la barbarie e inseguridad que son resultado de la corrupción, es momento de apostar por la educación verdadera, de inculcar valores que sean tan altos y sublimes que la corrupción sea algo impensable, algo del pasado, algo irrepetible.
Considero que el país esta ya en ese momento y en esa circunstancia, logramos ya avergonzar a quienes han usado la corrupción como forma de vida, a quienes se han beneficiado de ella, es momento de dar el golpe mortal y exigir una ley y un órgano anticorrupción con dientes y que castigue a los corruptos sean quienes sean, sin importar rango, ni oficina, ni jerarquía.
El filósofo Escocés del siglo XVIII David Hume decía que, “La corrupción de lo mejor es lo peor”, creo que es momento de escucharle y cambiar de rumbo.
¡Abajo la corrupción, que viva la libertad!
Analista Político, Periodista, Escritor.
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