Gaspar Núñez Rodríguez
13 de enero de 2022
MILENIO. Con la noticia de la “destitución” de Alejandro Madrazo Lajous como Director del CIDE Aguascalientes, Milenio inició una serie de publicaciones (artículos de “opinión” y “reportajes”) que muestran el carácter concertado de la campaña iniciada para defender los intereses mezquinos de las mafias que se apoderaron del CIDE a lo largo de los sexenios pripanistas. Esta campaña consta principalmente de tergiversaciones y francas mentiras, y de insultos y faltas de respeto a los principales involucrados con el compromiso de un cambio urgente: el saneamiento de las excesivamente viciadas instituciones públicas, el CIDE entre ellas.
UNA MENTIRA PRINCIPAL. Una de las mayores manipulaciones que ha sufrido la opinión pública y miembros de la comunidad del CIDE se da en torno a la supuesta violación de su “autonomía”. EL CIDE NO ES AUTÓNOMO. Es una A.C. pagada por los contribuyentes (sobre todo los cautivos), que depende como institución pública del Conacyt, y el nombramiento de su autoridad central (Director General) es atribución directa e irrestricta del ejecutivo federal; y punto. No existe una junta de gobierno, ni votaciones, ni nada por el estilo, los sondeos que se llevan a cabo por observadores externos e internos son solamente para informar la decisión, NO son vinculantes. Por si no fui bastante claro: En cuanto a su gobierno, el CIDE funciona de manera similar, no igual, pero similar, al IPN, que es una Dirección General en donde el nombramiento del Director General es atribución del titular de la SEP. En otras palabras, el nombramiento del Dr. Romero no es una imposición, es simple y llanamente un NOMBRAMIENTO hecho por la titular del Conacyt, para lo cual está perfectamente facultada por la normativa vigente.
¿POR QUÉ LOS INSULTOS, LA FALTA DE RESPETO, LAS DESCALIFICACIONES BURDAS? Simple. No es posible oponer objeciones relevantes a alguien de la talla profesional, humana y ética del Dr. Romero, ni a las capacidades y honestidad que le han caracterizado a lo largo de su meritoria carrera. Sin cola que le pisen, y sin el compromiso de pertenecer a las mafias corruptas que han viciado a las instituciones públicas, ha servido a nuestro país con un amor genuino, y ha denunciado con pundonor y decencia esos vicios, como lo demuestra el artículo de El Trimestre Económico que cité en mi anterior entrega. (Vol. LXXXVII(1), núm. 345).
LA “TRANSPARENCIA DEL CIDE”. El 6 de diciembre de 2021 se cerró la convocatoria para ocupar, entre otras, una plaza en la División de Economía. A fin de constatar la limpieza con la que operan estos procesos en el CIDE, y con la intención de continuar contribuyendo con mi trabajo docente y de investigación al desarrollo de nuestro país, decidí participar en el concurso y envié todos los requisitos estipulados. En la imagen siguiente se encuentra la respuesta que recibí, por parte del encargado.
Tal es la “transparencia” con la que operan las mafias del CIDE. El comité decidió que no pasa a la siguiente etapa y punto. ¿Porqué? ¿Cuáles fueron los criterios para que no pasara? ¿Cuántos participantes acudieron? ¿Quiénes sí pasaron a la siguiente etapa? ¿Cuáles fueron los criterios para que sí pasaran?
En estas mafias participan sujetos nefastos como el “científico” Fausto Hernández Trillo, sujeto capaz de cualquier bajeza con tal de consolidar su red de tráfico de influencias y corruptelas para mantener sus prebendas y privilegios. Y también participan en mafias interinstitucionales; Fausto Hernández pertenece al grupo de esbirros utilizado por Silvia Giorguli en el Colegio de México para violar mis derechos humanos y laborales. Otro muestra de la nefasta actividad “en pro de la ciencia” realizada por Hernández Trillo se observó cuando estuvo en la revista El Trimestre Económico, que puso al servicio de sus cuates del fundamentalismo neoclásicos (neoliberales), utilizando también el tráfico de influencias para la publicación de sus libros en el Fondo de Cultura Económica. Tampoco ha sido un secreto la participación de “investigadores” del CIDE en el trabajo sucio encargado por la administración Peña Nieto durante su sexenio.
CLAUDIO X. GONZÁLEZ. Nada más y nada menos¡¡¡. El tweet emitido por este “personaje” ilustra la clase de sujetos que están detrás de la campaña en contra del Dr. Romero y en pro de que el CIDE siga siendo un centro manipulado, de corrupción y tráfico de influencias, susceptible de ser conducido al campo de los trabajos sucios para los poderes fácticos en turno.
Así las cosas, el Dr. Romero con su honestidad, brillante carrera, amplitud de miras, y probada capacidad administrativa, representa sin duda una excelente alternativa para el saneamiento y reconducción del CIDE a un verdadero estado de libertad de cátedra, pluralidad de ideas, libertad de expresión, y libertad de investigación desde diversos enfoques y teorías alternativas al anquilosado paradigma neoclásico.
De no ser así, y si ganan una vez más las mafias del CIDE a través de su tramposa campaña, más valdría que esta A.C. fuese extinguida en los términos que la ley señala, y que se creara una nueva institución con mecanismos que aseguren una sanidad que responda a los intereses de quienes realmente trabajan para pagarla: las ciudadanas y ciudadanos de México.
Pregunta: Si el sector privado genera cuadros a través de instituciones como el Tec de Monterrey y como el ITAM para servir a sus intereses ¿Porqué los contribuyentes no pueden financiar instituciones que preparen cuadros para el servicio público? Es decir ¿Porqué el sector público no podría crear instituciones educativas y de investigación que preparen a personas con la honestidad y la capacidad necesarias para servir al bien superior de la nación y de los ciudadanos a través de las instituciones públicas?
Dr. Gaspar Núñez Rodríguez
Investigador Nacional Nivel I
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@DrGasparNunez
Ingeniero Agrónomo Especialista en Economía Agrícola por la Universidad Autónoma Chapingo; Maestro en Economía por El Colegio de México; Doctor Cum Laude por la Universidad Autónoma de Barcelona; Investigador Nacional Nivel I por el Sistema Nacional de Investigadores.
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