René Vega Giles
Con el simple cambio del secretario de Seguridad en Cuernavaca la Comisión Estatal de Seguridad Pública (CESP) pretende bajar el alto nivel de inseguridad que vive la capital morelense, en donde en las últimas horas una mujer fue asesinada y varios jóvenes heridos.
El ataque armado al bar Shopia la noche del pasado jueves, formó parte de una serie de actos delictivos cometidos en diversos lugares de la Ciudad de la Eterna Primavera.
Sin embargo, en todas las acciones los elementos policíacos estuvieron ausentes e incluso los operativos accionados de la presunta búsqueda de los agresores falló y hay temor entre la población por salir en las noches.
Las reacciones por parte de la sociedad por el ataque no solo al bar que operó clandestinamente porque carecía de licencia de funcionamiento son variadas, incluso han causado preocupación porque terminaría con la vida nocturna de la ciudad, en la que trabajan un 30 por ciento de sus habitantes en diversos comercios.
Incluso, el mismo alcalde de Cuernavaca, Antonio Villalobos Adán, advirtió que por el fracaso del Mando Mixto Coordinado el ayuntamiento continúa con su rechazo a firmar el convenio de adhesión.
En tanto, el sector magisterial, la asociación de padres de familia, así como otras organizaciones de la capital morelense exigieron el cese del titular de la CESP, José Antonio Ortiz Guarneros, al todavía continuar con experimentos en el área y ante el crecimiento del índice delincuencial.
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