Anabeli Franco
A cinco meses de que concluya las administraciones municipales, habitantes del municipio de Zacatepec pidieron la reinstalación del ex alcalde Abdón Toledo, luego de que éste fuera corrido de la ayudantía al intentar regresar cuando había pedido una licencia definitiva para contener a una diputación federal por el Movimiento Ciudadano, quien finalmente perdió.
La mañana de este viernes, alrededor de 50 habitantes de Zacatepec, principalmente del Centro y de colonias aledañas a ésta, arribaron al Palacio de Gobierno en Cuernavaca para pedir al mandatario estatal Graco Luis Garrido Abreu o al secretario de Gobierno Matías Quiroz Medina que reinstalaran al ex alcalde Abdón Toledo Hernández, ya que denunciaron que el actual suplente Juventino López Serrano, ha incurrido en varias irregularidades en su gestión, como el colocar a sus familiares en plazas de la comuna.
Sin embargo, Abdón Toledo, dicen, es una persona que les brindó mucho apoyo y que el pueblo pedirá que lo reinstalen, pese a que el 16 de junio del presente año en su intento de regresar a la comuna y exigirle a Juventino que se fuera porque él tenía derecho por Ley que tendría que recuperar su cargo, tres de los miembros del cabildo señalaron en su momento solapaba los malos manejos administrativos de la Tesorera documentando muchas irregularidades, entre éstas la compra de 500 lámparas que serían sustituidas que jamás aparecieron, además de obligar a los integrantes de cabildo que firmaran la cuenta anual del 2015 (el pasado mes de abril) y documentos como “cheque en blanco” a cambio de incrementarles sus dietas o compensaciones, para que les comprara sus votos.
Los quejosos argumentaron que el suplente que hoy está a cargo de la administración municipal fue colocado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), por lo que pidieron al gobernador de Morelos Graco Luis que atendiera su petición de lo contrario amenazaron con bloquear el estadio el equipo “querido” del mandatario; es decir, realizarían desmanes en el Estadio “Coruco Díaz”, ubicado en ese municipio, así como de boicotear la tradicional feria que se realiza al principio de año.
Durante la manifestación, los habitantes privaron de la libertad a cerca de 80 personas de la tercera edad, quienes estaban realizando gestiones administrativas respecto a sus jubilaciones, mismos que permanecieron encerrados por una hora al igual que el personal administrativo.
Posteriormente, los manifestantes de manera grosera dijeron que las personas de la tercera edad se quedaran ahí aunque padecieran enfermedades, pues no les importó que estuvieran pidiendo salir para acudir al médico porque se les subía la presión o tuvieran que tomar su medicamento para la diabetes.
Tras varios minutos de gestionar la salida de las personas mayores, lograron salir únicamente enseñando su identificación que les permitía hacer trámites en el inmueble del Ejecutivo para después volver bloquear los dos accesos principales y la puerta del estacionamiento.
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