Propuestas populistas de los candidatos

Ivan Ureña

Este artículo se escribió el 29 de abril del 2012; hace más de un año, pero sólo circuló por medios electrónicos ya que la prensa escrita del Estado de Morelos lo censuró; sin embargo, por lo pertinente del texto, sobre todo a raíz de la polarización social y política que ha generado la intención de contratar una deuda multimillonaria por parte de las autoridades del estado se reproduce íntegramente.

El pasado 26 de abril, Amado Orihuela, candidato del PRI y del partido Verde al gobierno del estado de Morelos, propuso a los hombres de negocios del Consejo Coordinador Empresarial: “vamos a eliminar el impuesto de dos por ciento a la nómina que tanto ha afectado a los empresarios y que ha obstaculizado la generación de empleos en Morelos” y acto seguido vino un aplauso apoteósico de parte de los hombres del dinero. Al día siguiente, fue la nota principal en prácticamente todos los medios informativos del Estado; sin embargo, si bien es cierto que esta propuesta beneficiaría a los hombres de dinero, no necesariamente es una política pública acertada. Ya que como principio básico de todo sistema recaudatorio está que pague más quien más gana, y este impuesto recae sobre quien más gana, que son los empresarios, y también se debe buscar, en la medida de lo posible,  no inhibir la actividad productiva, que en sentido llano querría decir que al implementarse este impuesto no provoca que dejen de crecer o crearse nuevas empresas y, por lo tanto, de generarse empleos; pero, para los empresarios, el dos por ciento de nómina es mucho menos trascendente que el burocratismo, la corrupción y la inseguridad.

En las reuniones, es común escuchar que tal o cual empresario cerró su empresa o se movió de ciudad a causa de la inseguridad o cansado de la corrupción; pero que haya cerrado una empresa o dejado de crecer a causa del dos por ciento, no. Aclaro, para evitar dudas y malas interpretaciones, esa propuesta en mi calidad de empresario me beneficia, pero no es una política pública acertada.

Ciertamente, esta medida beneficia en un principio al empresariado, ya que en la Ley de Ingresos del 2012 se prevé recaudar por esta vía 313 millones 780 mil pesos a costillas de los hombres del dinero, pero el asunto central es que durante el siguiente sexenio se estarían dejando de ingresar al menos mil 900 millones de pesos, lo que hace necesaria la siguiente reflexión: ¿De dónde van a obtener esos recursos?  ¿Van a subir los impuestos a los trabajadores? ¿Se va restituir la tenencia vehicular? ¿Se va a endeudar el Estado? Porque no se pueden quitar los impuestos, sin subir  por otra vía la recaudación. Pero si Amado ha hecho propuestas populistas, su seguidor no se queda atrás.

El día 18 de abril, Graco Ramírez propuso ante productores de la zona sur del estado, duplicar la inversión, para alcanzar los 8 mil millones de pesos de inversión directa al campo morelense, cien por ciento más de lo que se va a aplicar en el último año del actual gobierno. Y remató diciendo: “en el gobierno de la Nueva Visión, todos caben y reactivaremos el campo morelense”. Nadie en su sano juicio podría decir que se opone a que se invierta en el campo y que se reactive, pero, al mismo tiempo, alguien con un mínimo conocimiento de economía y finanzas, concluirá que esa propuesta de política pública, para realizarse, implicará la impresionante cifra de 24 mil millones de pesos el siguiente sexenio, por lo que se hace obligada la reflexión: ¿De dónde saldrá esa descomunal cantidad? ¿Se subirán los impuestos, a quién? ¿Se dejará de gastar, en qué? ¿Se endeudará al Estado?

FALTA EL CÓMO

Generalmente, los políticos son vagos al hacer sus propuestas y hasta el cansancio se repite en todas las campañas que se recaudará más aunque no dicen cómo, o también que se gastará más eficientemente pero tampoco dicen cómo, otros más argumentan que se le exigirá a la federación más presupuesto pero sin decir bajo qué argumento o por qué razón la federación tendría que darle más a un Estado y no a otro, porque si fuera tan sencillo todos los Estados pedirían mucho más recursos y naturalmente que la federación ni tiene la capacidad económica ni recaudatoria para cumplir todas las solicitudes. Graco Ramírez, también propuso destinar 480 millones de pesos a la Universidad del Estado, en lugar de los 250 millones de ahora, por supuesto tampoco dijo cómo lo iba a obtener. Es de reconocer que este político ha hecho algunas propuestas específicas, como decir que se ahorrarían 300 millones de pesos anuales porque no contaría con asesores; sin embargo, en el presupuesto de Egresos del Estado del 2012 por ningún lado se encuentra esa cifra, aunque quizá el ex-senador tenga información privilegiada y no sería de extrañar que sí se erogue eso en asesores, pero bien haría en aclararlo. Asimismo, agregó que se dejarían de gastar 800 millones de pesos anuales en comunicación social; no obstante, la información disponible para 2011 manejó un gasto por ese rubro de 217 millones de pesos, quizá la información del senador sea veraz, aunque otra vez, mucho se agradecería que aclarara de dónde la obtuvo y cuál es su fuente; aun dándole el beneficio de la duda, estaríamos hablando de un ahorro de mil cien millones anuales, pero tan solo para el campo y la universidad se necesitarían recursos adicionales por 4 mil 230 millones de pesos, es decir, en el mejor de los casos más tres mil 100 millones cada año, pero ¿de dónde se van a obtener esos recursos?

 

Candidato Propuestas Costo sexenal
Amado Orihuela PRI/VERDE Abolir el 2% sobre nómina En 2012 se proyecta recaudar 313 millones 780 mil pesos por este  concepto. De abolirlo, por lo menos se dejarían de ingresar más de mil 900  millones de pesos.
Graco Ramírez, Coalición Nueva Visión Progresista Morelos Incrementar a 8 mil millones de pesos el presupuesto al campo y destinar 480 millones de pesos a la Universidad Estatal Entre el campo y la Universidad, se necesitarían 4 mil 230 millones adicionales, cada año, por lo que durante el sexenio estamos hablando de más de 25 mil 300 millones de pesos.

 

Ante la forma en que hacen las propuestas los políticos, sin explicar de dónde van a obtener los recursos para cumplir sus propuestas de desaparición de impuestos o incremento descomunal en el gasto, se podría dar el caso que un candidato de los que va abajo en la preferencia electoral acuse al candidato Amado Orihuela de apoyar poco al empresariado y proponga no sólo abolir el impuesto del dos por ciento sino hasta para ayudarles con un dos por ciento a pagar los salarios, y a su vez acuse de poca sensibilidad social a Graco Ramírez por sólo proponer 8 mil millones de pesos en el campo morelense, aduciendo que se deberían invertir 16 mil millones, claro, sin decir de dónde saldrían esos recursos, como dijera un viejo dicho popular: “el prometer no empobrece, cumplir es lo que aniquila”.

Sobre Iván Ureña 304 artículos
Premio Nacional de Periodismo 2017. Premio Estatal de Periodismo Morelos 2012, empresario y maestro en Economía por el ITAM. Funcionario en Banobras, Hacienda y Secofi.

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