Granito de Arenas
José Arenas Merino
3 de enero del 16
La situación que priva actualmente en Cuernavaca y los otros 14 municipios a que alude el decreto que emitió el gobierno estatal en torno a la instauración del llamado Mando Único, habrá de resolverse en los tribunales, y para ser más preciso, en el más alto de ellos, es decir, la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
El Mando Único es un tema cuya antigüedad se remonta a la administración federal anterior a la que hoy está en funciones, es decir, a la de Felipe Calderón y la iniciativa de su creación se encuentra en proceso de formulación para su incorporación a la Constitución Federal, en el congreso federal. Mientras no haya una reforma a los artículos de este, el máximo ordenamiento legal, lo que se haga para instrumentarlo estará fuera de la ley. Así se simple.
El precepto que actualmente rige y al que se acogen los presidentes municipales que se han resistido a que en sus respectivos ayuntamientos opere en Morelos ese cuerpo policiaco es el artículo 115, que dice al respecto en uno de sus incisos lo siguiente:
“Artículo 115.
III. Los municipios tendrán a su cargo las funciones y servicios públicos siguientes:
h) Seguridad Pública, en los términos del artículo 21 de esta Constitución, policía preventiva municipal y transito”.
Le corresponde, por tanto, al alcalde cumplir esa función y lo debe hacer con sus propios recursos económicos y humanos, ejerciendo el presupuesto que le fija el erario para capacitación y salarios de los elementos que integran la policía preventiva y de tránsito vehicular.
Por otra parte, en el mismo artículo se establece una excepción, que deriva de lo que en otro inciso se establece y que dice así:
“VII. La policía preventiva estará al mando del presidente municipal en los términos de la ley de seguridad pública del estado. Aquella acatará las órdenes que el gobernador del estado le transmita en aquellos casos que este juzgue como de fuerza mayor o alteración grave del orden público”.
En este inciso, y de acuerdo a su propia interpretación de lo que se ha de entender por “fuerza mayor o alteración grave del orden público” es que se emitió el ya mencionado decreto del gobierno estatal.
De ahí que será la Suprema Corte la que decida si esta interpretación se ajusta a la realidad actual; sin embargo, el trasfondo de todo esto está precisamente en el tema de los recursos económicos: el jugoso monto de los mismos, cuando se ponen todos en un mismo cajón, suman muchos, muchos millones de pesos y si se pueden administrar centralizadamente, con la opacidad con que se maneja el dinero en Morelos, no hace falta ir muy lejos por la respuesta.
Seguro estoy de que la Suprema Corte fallará a favor de los ayuntamientos que acudan a ella; pero la solución final la tienen los legisladores federales quienes, como es previsible, acatarán lo que el presidente ya les indicó y más pronto que tarde habrá, a nivel nacional, el tal Mando Único. Por ahora es el Bando Único.
48 años de ejercer el periodismo escrito, televisivo, radiofónico y digital. Primer corresponsal de El Universal y Radio UNAM en Europa y Notimex en Europa de Este. Director fundador del primer medio en Internet en Morelos. Abogado, escritor, locutor y textoservidor. Amigo de sus amigos. Libre pensador. Piscis.
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