Reprochan periodistas falta de interés de Nadia Lara y Capella para con el gremio
Por Yuridia Durán Rivera
Representantes del foro de comunicadores ante el Comité del Mecanismo de Protección a Periodistas, criticaron que el Tribunal Superior de Justicia que preside la magistrada Nadia Luz Lara Chávez “ha mostrado un completo desinterés por el tema y ha menospreciado los llamados a sumarse a los esfuerzos y atender temas pendientes relacionados con la cobertura de los juicios orales”.
De igual manera, sostuvieron que la Secretaría de Seguridad Pública, hoy convertida en la Comisión Estatal de Seguridad Pública, cambia constantemente de representante y los funcionarios que acuden son empleados del área de Comunicación Social sin facultades operativas.
El pronunciamiento fue hecho por el Comité saliente integrado por Maciel Calvo, Justino Miranda, Oswald Alonso y Tlaulli Preciado, y refrendado por el Comité entrante que conforman Jesús Castillo, Estrella Pedroza, Claudia Marino, Antonio Rivera y Máximo Cerdio, quienes tomaron protesta en una ceremonia en Palacio de Gobierno.
A nombre de los primeros, Maciel Calvo sostuvo que persisten viejas prácticas que buscan inhibir el ejercicio periodístico. “Aun en los gobiernos más progresistas vemos todavía que secretarios de despacho recurren a su influencia y al telefonazo para pedir el despido de los reporteros, no hace mucho ocurrieron aquí dos casos”.
Agregó que también algunos diputados y presidentes municipales recurren a las más viles pericias para intimidar, provocar temor y con ello el silencio, ante su falta de capacidad, razón y conocimiento para debatir y agotar el camino del diálogo y la legalidad para la resolución de diferencias. “Incluso, altos funcionarios se han atrevido a decir que en Morelos los reporteros hacemos “terrorismo periodístico”, cuya expresión no es más que un signo de intolerancia”.
Por su parte, en representación del nuevo Comité, la reportera Claudia Marino solicitó la participación activa de todos los representantes de los Poderes del estado y organizaciones e instituciones para dar vida al mecanismo y hace cumplir su objetivo principal que es proporcionar y garantizar la protección eficaz y eficiente a los periodistas y que con motivo su actividad se encuentren en situación de riesgo, amenaza o vulnerabilidad, así como de su familia.
“Urgimos a que los representantes que no han asistido a las reuniones y forman parte de este mecanismo, como el caso del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), para que nombren lo más pronto posible a un representante con facultades de toma de decisión y se mantenga activo y comprometido con el tema”, dijo.
Y es que, a decir de los integrantes del Mecanismo, el magistrado Andrés Hipólito Prieto hizo un excelente papel como miembro de este cuerpo colegiado, pero cuando hubo un rompimiento entre el servidor público y la presidenta del TSJ, ésta envió como representante al magistrado Juan Emilio Elizalde Figueroa, quien pese a haberse desempeñado como periodista en sus inicios, en los debates siempre estuvo del lado de las autoridades.
En el evento se recordó que fue en julio de 2010, derivado de la aparición de mantas con mensajes amenazantes contra periodistas por parte de un grupo delictivo, cuando surgió el debate al interior del gremio de adoptar medidas de autoprotección, y sobre todo la urgente necesidad de exigir al Estado Mexicano y a los gobiernos en turno de cumplir a cabalidad con su responsabilidad legal y moral de garantizar los derechos a la libertad de expresión y el acceso a la información pública.
Después de duros debates y de sortear resistencias por todos los flancos, se logró concretar un convenio para la creación del Mecanismo de Protección a Periodistas del Estado Mexicano que fue suscrito, además del “Foro de Periodistas”, por el gobierno estatal que encabezaba Marco Adame Castillo y representantes de la Secretaría de Gobernación, colocando a Morelos como estado pionero.
Asimismo, se dejó en claro que la instauración de este mecanismo, que muchos consideran como insuficiente e imperfecto, no fue ninguna graciosa concesión de ninguna autoridad, fue producto de la lucha de un grupo de reporteras y reporteras que de manera voluntaria y honorífica aportaron ideas, tiempo y sobre todo esfuerzo para demoler muchos obstáculos en el camino para exigir la protección y el respeto al ejercicio periodístico.
Del 2012 a la fecha, se activó el mecanismo en 13 ocasiones para apoyar a periodistas afectados por amenazas, lesiones, robos y extorsiones, entre otros delitos.
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