
YO ACUSO
Armando Vargas Mora
Apatzingán, Michoacán; 17 de Febrero de 2019.- En su toma de posesión, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial Carlos Salazar, entre otras cosas dijo: “la clave para la prosperidad de las naciones, es necesario experimentar un acelerado crecimiento económico, desarrollo social, educativo y cultural, para ello se ocupa un pacto de eficiencia máxima entre el gobierno y el sector productivo. Las autoridades públicas respectivas estarán encargadas de construir y de hacer respetar un estado de derecho que contenga las reglas de operación y convivencia civilizada con las que se instrumente y garantice un eficaz sistema de impartición de justicia”, insiste en que “los tres principios fundamentales para la evolución política, económica, social y cultural de México son los siguientes: Estado de Derecho, Estado de Derecho y Estado de Derecho”.
En términos generales se trató de un discurso muy bien elaborado, pero me llamó la atención el énfasis que puso en la necesidad ineludible de la aplicación del Estado de Derecho, porque eso es precisamente lo que no hay en Michoacán. En este espacio reportamos que desde el pasado 14 de Diciembre los tramos carreteros Apatzingán-Aguililla y Apatzingán-Buena Vista han sido violentados prácticamente todos los días, y la cuestión tan delicada no se ve para cuándo termine. No podemos transitar libremente como lo mandata la Constitución Política, con el terrible ingrediente de que los transeúntes pueden quedar atrapados en un fuego cruzado en vista de que las balaceras igualmente siguen siendo cotidianas; sobre la cantidad de personas fallecidas se hablaba de cualquier cantidad, sin contar, desde luego, con un reporte de las instancias de gobierno. Sin embargo, el día de hoy, hasta hace unas cinco horas aproximadamente, en el Facebook de la Policía Estatal Fuerza Rural se reporta que entre ayer y hoy, en menos de 48 horas han sido asesinadas 32 personas. No existe ninguna garantía de los tres órdenes de gobierno, mientras tanto en la Cámara de diputados desde hace más de 10 años no saben cuál es el modelo policíaco a seguir. La Guardia Nacional nacerá con la mascarada de mandos preponderantemente civiles, todos sabemos que la militarización será ineludible, pero ahora si con un marco legalizado. Sea como sea, lo importante es que ya exista orden porque México ya tiene tiempo convulsionado.

Y muy particularmente en Michoacán, si desde antes de la llegada de Silvano Aureoles Conejo a la gubernatura esto era la anarquía y el caos, después de que tomó posesión hace 3 años con casi 5 meses, los michoacanos estamos viviendo el vil infierno. Cíclico han sido la toma de carreteras y quema de vehículos, con un evidente aumento en casi todos los rubros delincuenciales y un estado prácticamente paralizado durante el último mes en que fueron tomadas vías férreas, oficinas de rentas y presidencias municipales, apenas liberadas y que, esperamos que a partir de este lunes todo vuelva a funcionar como es el deseo de todos.
Pero lo que vemos muy difícil es la normalidad en las carreteras, en los tramos señalados. Porque cotidiano es que desde la salida de Apatzingán, apenas a 4 kilómetros, en chandio inicien los bloqueos carreteros. Y de ahí para delante, en los Hornos, Agua Buena, Colonias “Cenobio Moreno”, la huina, Pinzándaro, la comunidad de Eréndira, Catalinas, División del Norte, el terrero; igualmente de Apatzingán-Buena Vista, y más peligroso el tramo de Santa Ana Amatlán-Buena Vista en vista de que los delincuentes, con sus pavorosas armas, están parando y robando parejo, los lugareños comentaron del robo de hasta 6 o 7 vehículos diariamente, ni hablar del dinero y otras pertenencias. Como es lógico de suponer, la mayoría de los afectados tienen miedo de poner la denuncia penal respectiva ya que la tarjeta de circulación tiene el respectivo domicilio, si acaso van a realizar el reporte de los datos de su vehículo para evitarse problemas posteriores con las autoridades ya que pueden ser utilizados para actividades delictivas.
Por eso cuánta razón tiene el Presidente del Consejo Coordinador Empresarial Carlos Salazar, los mexicanos necesitamos esos tres principios fundamentales para la evolución política, económica, social y cultural: Estado de Derecho, Estado de Derecho y Estado de Derecho.

El presidente de México Andrés Manuel López Obrador dice que todos los días por la mañana, el equipo de seguridad compuesto principalmente por el Secretario de la Defensa Nacional, General Luis Crescencio Sandoval González; el Secretario de la Marina, Almirante José Rafael Ojeda Durán y el titular de la SSP Alfonso Durazo, le informan sobre la situación del país, sobre los graves problemas de inseguridad que estamos padeciendo. AMLO es la esperanza de México, especialmente de los michoacanos, pero yo creo que no le han informado que ya tenemos más de dos meses con este suplicio, de este sufrimiento social, de esto que se ha convertido en el infierno mismo para los michoacanos de esta parte de la tierra caliente. No hay temor, hay un justificado terror en muchas de las familias que ni de sus casas quisieran salir.
Y en medio de esa esperanza que para muchos sigue siendo AMLO, surge la incredulidad y el desaliento por las declaraciones vertidas por el Secretario de Seguridad Pública Alfonso Durazo, dijo que “en cuatro años el gobierno sí podrá ponerse al tú por tu con el crimen organizado”. Dicen los abogados que “a confesión de parte, relevo de pruebas”. ¿Es ésta la explicación a la tragedia que nos está ocurriendo? ¿Está confesando la incapacidad del estado mexicano para hacer frente a los delincuentes? ¿Es correcto que el secretario, sin ningún rubor declare esto a la nación a través de TV? ¿Así es como esperamos la impartición de justicia los mexicanos?
Tal vez por el diagnóstico anterior, AMLO ha dicho reiteradamente que no combatirá el fuego con el fuego, señala atinadamente sobre medidas y actitudes podridas de los gobiernos anteriores, así como las malas políticas públicas en materia de seguridad. Dice que el problema debe atacarse de raíz y anuncia un plan de becas para jóvenes que ganarán 3 mil 600 pesos mensuales, es decir 120 pesos diarios, dice que serán aprendices en alguna artesanía u oficio. ¿Y todo lo que está podrido? ¿Serán de verdad más atractivos 120 pesos diarios para esos jóvenes y para los desempleados?

Por último, dice López Obrador que cuenta con un millón 500 mil pruebas de la corrupción “nada más en lo que era SEDESOL”.
Peña Nieto, Luis Videgaray, Rosario Robles Berlanga, Gerardo Ruiz Esparza, Luis Miranda, Virgilio Andrade, Alberto Elías Beltrán, Alfredo del Mazo Maza, Pedro Joaquín Codwell, Aurelio Nuño, Jesús Murillo Karam, Emilio Lozoya Austín y Francisco Rojas Gutiérrez entre muchísimos más, son el emblema de la corrupción del sexenio pasado. México no quiere ninguna venganza, ni tampoco borrón y cuenta nueva, México lo que quiere es JUSTICIA.
Después del Millón y medio de pruebas que dice Andrés Manuel López Obrador, tener en sus manos, acerca de la tan evidente corrupción del sexenio pasado de SEDESOL, ¿Seguirá asegurando, como lo hizo hace unos meses, que Rosario Robles es tan solo un chivo expiatorio? ¿Será que hay millares de culpables y una chiva expiatoria? Veremos.
Contador y analista político
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