René Vega Giles
En la comunidad rural Chisco, del municipio de Jojutla, alrededor de 200 menores siguen sin recibir clases ante la falta de internet, en un pueblo considerado en condición de pobreza.
Padres de familia y directivos reclamaron al Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM) mantenerlos en el abandono, porque les prometieron proporcionar equipo de cómputo y hacer llegar la academia de manera virtual.
El ciclo escolar que concluirá en menos de cuatro meses era llevado a través de algunos teléfonos celulares prestados, pero fueron insuficientes para que los menores recibieran clases en línea.
Al parecer no es la única comunidad en la región sur del estado en donde los menores a falta de internet dejaron de recibir su docencia, debido a que profesores de la zona señalaron que en las rancherías hay docenas de niños tampoco pudieron acceder ni a la televisión.
En algunos casos, indicaron que los profesores asistieron físicamente a proporcionar sus clases, sin el apoyo de las autoridades y dejaron de asistir al contagiarse de Covid-19.
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