
Por Iván Ureña
La teoría y la historia económica
En innumerables ocasiones la historia económica nos ha enseñado el comportamiento de los consumidores cuando perciben la posibilidad de falta de un producto, lo primero que hacen es incrementar las compras para prevenirse, ocasionando un incremento en la demanda y si en efecto había una menor oferta, se agudiza el problema e inician las grandes filas para adquirir el “preciado artículo”. La autoridades, pretendiendo resolver el apuro, responden racionando las compras, pero lejos de resolver la escasez, ésta crece: aparecen las llamadas compras de pánico, concomitantes con la “mordida” o “dádiva” para obtener un poco más de lo “establecido” o no hacer fila y se enseñore el mercado negro, en él se puede conseguir todo lo que se desee pero a precios sensiblemente superiores.
Entre los casos más connotados en México, tenemos: en la colonia, el mercurio; en la capital, en plena revolución, el maíz; más recientemente, a finales de la década de los 70 el azúcar y a principios de los 80 el Dólar. Actualmente lo estamos viviendo con la gasolina.
Se cierran ductos para evitar el robo
Ante el abundante robo de combustible, se cerraron las válvulas de al menos cuatro de los 13 oleoductos de Pemex, para evitar que los «huachicoleros» extrajeran gasolina de los ductos. Ocasionando que también se interrumpiera el suministro a ciudades de diferentes estados. Se empieza a surtir con camiones cisterna, pero la demanda es mayor.
Desde diciembre del 2018 se empezó a sentir desabasto de gasolina, principalmente en Michoacán y Jalisco, pero el problema se agudizó con el inicio de año. La escasez ya llega a nueve estados: Tamaulipas, Aguascalientes, Puebla, Quéretaro, Estado de México, Jalisco, Guanajuato y Michoacán, destacando por su gravedad estas últimas tres entidades; sin embargo, Pemex todavía el 6 de enero negaba que hubiera desabasto, lo mismo que dice AMLO, pero ante la contundencia de las filas, a PROFECO no le quedó más que aceptar la realidad y respondió autorizando las ventas racionadas. Aunque la capital del país parecía blindada, desde el martes 8 empezó a padecer largas filas en algunas estaciones de servicio, las autoridades volvieron a negar que hay desabasto.
Poquísima capacidad de almacenaje
Se reporta que en el occidente, donde se originó el problema, hay capacidad de almacenaje de dos días para la gasolina; mientras en el Centro, que incluye la CDMX y Edomex, sólo es de un día. De tal manera, que si continúan las compras de pánico, pueden agotar todo el producto almacenado y entonces sí sería un problema fortísimo que terminaría impactando la actividad económica de estas estratégicas regiones.
Nadie en su sano juicio se opone a que se combata el robo de combustible incluso es una exigencia casi generalizada en el país, pero es un error de política pública, pretender combatir un mal, “el huachicol” y generar uno mayor, desabasto y afectación a la actividad económica, en perjuicio de la población, a la que en teoría se pretende beneficiar. Dice el refrán popular, salió peor el remedio que la enfermedad.
Las prisas generalmente no son buenas consejeras
AMLO tiene prisa por explicar de dónde va a obtener los cuantiosos recursos para sus diferentes proyectos. En el caso del Programa la Zona Libre de la Frontera Norte, argumentó que el robo diario de pipas había bajado de mil 100 a sólo 36, lo que permitiría un ahorro anual al gobierno Federal de más de 50 mil millones de pesos, los cuales se usarían para financiar ese polémico programa. Aunque más recientemente modificó las cifras, un robo promedio de 787 se logró bajar a 177, si bien sigue siendo todo un logro, ya no está hablando de los mismos montos.
Concusiones
Es condición necesaria, acabar con la escasez, no con declaraciones sino con hechos, que las estaciones de servicio tengan suficiente gasolina y disel, caso contrario seguirán las compras de pánico. Además, si la carencia dura más tiempo, sin duda habrá un impacto en la actividad económica en el primer trimestre del año para la región occidente.
Pemex dice que reabrirá los ductos hasta que se encuentren asegurados. ¿Era realmente forzoso cerrarlos, para luego asegurarlos?, y de ser así, por qué no se procedió de uno en uno, sería más sencillo abastecer con pipas lo que deja de trasladar un ducto, no se hubiera padecido escasez o sería de un tamaño menor, pero desgraciadamente no fue esa la estrategia, decidieron cerrar cuatro de golpe y generaron una escasez que al día de hoy no se ha podido cubrir en sus totalidad.
Todo indica que las prisas llevaron al presidente a un error de cálculo y sencillamente se equivocó; sin embargo, López Obrador ha demostrado ser muy astuto y taimado, por lo que tampoco podemos descartar que lo hizo de forma deliberada, había terminado el Guadalupe-Reyes, optó por poner una cortina de humo, sobre temas que les son muy incómodos: la cancelación del NAIM y lo que va a costar, no han aparecido los famosos ochocientos mil millones de pesos o cantidad cercana que se iban a tener por el combate a la corrupción, la muerte de la gobernadora de puebla y la investigación, El Tren Maya y su conflicto con Los Zapatistas, las declaraciones patrimoniales que varios de sus colaboradores no quieren transparentar y amenazaban con terminar en renuncias. Ahora todo es “huachicol” y escasez de gasolina.
En un caso para Ripley, el sindicato petrolero, un actor fundamental y responsable directo, en el colmo de la desfachatez dice apoyar con todo esas medidas que califica de correctas. Se combate la corrupción, pero ni con el pétalo de una rosa se toca a los corruptos líderes petroleros.
ivanure@hotmail.com

Premio Nacional de Periodismo 2017. Premio Estatal de Periodismo Morelos 2012, empresario y maestro en Economía por el ITAM. Funcionario en Banobras, Hacienda y Secofi.
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